De como engañe a mi esposa para que se la chupara a un amigo

FECHA: 9/30/2013

Hola. Soy Miguel y les cuento como mi esposa se la chupo a su mejor amigo mientras yo me la cogía.

Tenia tiempo con la fantasía de que mi esposa se vistiera como una autentica puta y que tragara leche de otro hombre. Me imaginaba mi esposa vestida con botas de tacón altas, con disfraces de colegiala o secretaria paseando como una buena zorra delante de otro hombre y a la final chupándosela mientras yo me la cogía y corriéndonos todos juntos…  pero ella siempre a sido muy recatada por lo que se me hacia muy difícil idear un plan y convencerla hasta que un día se me presentó la oportunidad ya que su mejor amigo venía de trabajo a la ciudad donde estábamos viviendo. Al ser un amigo en común (aunque mas amigo de ella que mio) le pude comentar que se quedara en nuestra casa, que no tenia necesidad de estar en un hotel teniéndonos a nosotros y a ninguno de los les extraño la propuesta ya que nunca tuvimos ningún tipo de problemas y yo aprovechando la situación inicie las preguntas a mi esposa:

- “¿Por qué José (nuestro amigo) no tenía pareja si era bien parecido?” y preguntas por el estilo.

A lo que mi esposa decía que era verdad, que nunca le conoció novia formal, que sabía que había salido con varias mujeres pero nada serio y yo le comentaba que él era alto, atlético y bien parecido… le comenté que seguro si no estuviéramos casado ella podría interesarse en él… y así seguí con un serie de preguntas discretas llenando de ideas su cerebro, tratando de despertar su lujuria.

Cuando José llegó, después de acomodarlo en el cuarto de huéspedes lo invité a que me acompañara a comprar unas pizzas para cenar mientras mi esposa acomodaba el comedor. Mi intención era decirle de frente a José mis planes y esperar que el estuviera dispuesto. .. una vez que salimos en el carro y recorrimos un par de cuadras preparé el terreno con José diciéndole que quería que me ayudara en algo con mi esposa y que era algo difícil pero que esperaba que comprendiera y que si no deseaba hacerlo que mantuviera mi propuesta en el anonimato. José pensó que yo deseaba separarme o algo así, pero después de contarle que quería ver mi mujer chupársela a otro hombre se quedo pensativo.

A la final le dije: “José: piénsalo y me avisas mañana, si te incomoda no digamos nada y seguimos como hasta ahora”

A José le preocupaba como encarar a mi mujer ya que nunca tuvieron miradas ni encuentros mas allá de la pura amistad; pero le dije que al día siguiente llegara temprano a casa y pusiera un canal donde pasan películas porno y se empezara a masturbar calculando la hora en que llegaría mi esposa a casa, que se hiciera el distraído y que si mi mujer le hacía un escena que se disculpara y que fingiera que tenia tiempo sin tener relaciones y sentía que le explotarían las bolas. Que aprovechara la oportunidad y le mintiera diciendo que ella le gustaba mucho desde hace tiempo y que nunca había intentado nada por respeto. José se quedo pensativo todo el camino y de regreso me comento que lo intentaría, que era algo que nunca había pensado pero que ahora le excitaba la idea y empezaba ver a mi mujer, que no era muy alta, pero que tenia unas buenas tetas y un culito redondito, como una mujer deseable. Yo pude darme cuenta que era verdad por el bulto que se le formó en sus pantalones.

De regreso en casa comimos pizza, nos contamos historias, tomamos un poco de vino y observe como José miraba a mi esposa. Con música de fondo, estando los tres juntos José me pidió permiso para bailar con mi mujer a lo que yo comenté que no tenía ningún problema y vi como José iniciaba la preparación del terreno para lograr nuestros objetivos aprovechando para comentar en voz alta lo linda y bella que estaba mi mujer a lo que ella se ruborizaba y yo ye le seguía el juego diciendo que sí, que ella era un mujer linda y que incluso si no me hubiera conocido seguro ellos hubieran hecho una buena pareja.

Así entre bailes y conversas llegamos al final de la noche. Noche que aproveche para hacerle el amor salvajemente a mi mujer pensando en lo que pasaría al día siguiente.

Al día siguiente cuando llegué vi a mi esposa nerviosa pero hice como si nada pasara. Eso era un signo de que José había aprovechado la ocasión como la teníamos preparada y que a mi esposa la había puesto nerviosa.

Como esa noche tenía fútbol con mis amigos y a mi esposa no le gusta el fútbol aproveche para invitar a José y de esa forma conocer los detalles. Mi esposa se despidió muy rápido diciendo que estaba cansada que se tomaría una ducha y se acostaría a dormir. Mientras tanto José y yo salimos en el auto y me empezó a contar todo lo ocurrido: como estaba viendo el canal de películas porno mientras se pajeaba y mi esposa lo había visto. De como el empezó a disculparse y empezó recogiendo sus cosas en la maleta disculpándose y diciendo que inmediatamente se marcharía a un hotel haciéndose el avergonzado. Mi mujer cuando pudo reaccionar le pidió que se calmaran y que no se fuera porque no sabría que excusa darme ante su partida a lo que José se arrodillo diciéndole que ella le gustaba y que era como estar en un paraíso al poder verla todos estos días y un montón de cosas más.

Por supuesto mi mujer estaba impactada por todo lo que había visto y oído y la final le pudo arrancar el comentario de que ella estaba casada, que de lo contrario podía pensar en José de otra forma pero que no quería serme infiel.

José despues de una larga conversación logró convencerla de que me haría la propuesta de un trío. Que me diría que es una idea nada mas de él y que buscaría la forma de decírmelo sin comprometerla a ella y sin hacerme enojar. Que si yo aceptaba entonces José simularía que hablaría con ella para hacer la propuesta y ver como terminaba todo.

José se dio cuenta de que no estábamos camino a la cancha de fútbol sino a un centro comercial y entonces le conté la otra parte de mi plan: yo compraría una serie de botas y zapatos de tacón alto y varios disfraces de mucama, colegiala y secretaria que José escondería en su maleta y en el momento de mayor excitación los sacaría y diría que es para un amigo que se lo pidió de regalo a su esposa pero que aprovechando la oportunidad que lo usara mi mujer. Que la obligara a poner los diferentes zapatos y las diferentes ropitas y que desfilara por toda la casa y despues que se la chupara mientras yo me la cogía.

Después de las compras hicimos tiempo simulando que yo jugaba al futbol y volvimos en la noche a la casa. José guardo la ropita en su maleta mientra yo me bañaba y me fui a acostar. Mi esposa ya estaba durmiendo o simulando que dormía ya que ella pensaba que José me había hecho la propuesta. Al día siguiente yo me desperté normal y noté que mi mujer me preguntaba mas que de costumbre como había estado el futbol y la noche, que si no había pasado nada especial y a todo esto yo le comentaba que todo había estado normal. Despues de desayunar me fui al trabajo despidiéndome de José y de mi mujer, imaginando la conversación que seguiría.

Al yo salir (me comentó José después) mi esposa interrogo a nuestro amigo, que le dijo que me había comentado la idea de hacer un trio, que mi mujer no sabia nada y que nuca se había insinuado. José le dijo que yo me había negado al principio pero que logro convencerme de que esa era un fantasía de todas las mujeres y que José le preguntaría a mi mujer para ver si ella quería.

En fin: engañamos a mi esposa, haciéndola pensar que José le gustaba, que me hablaría para proponer un trío, que yo aceptaría y que después de eso José simularía hablar con ella quedando él como el autor de todas las propuestas.

Al llegar en la noche a casa mi esposa estaba en el sofá viendo televisión con José. Yo me acerque a saludarla, le di un fuerte beso y le dije al oído:  -”José me contó todo y si tu quieres lo hacemos”. Mi esposa solo movió la cabeza para afirmar y miramos a José. Inmediatamente José saco de la maleta la ropita que habíamos comprado la noche anterior y dando la excusa de que era un regalo para otra pareja se la dio a mi mujer que al principio se extraño pero después de unos piropos por parte de los dos machos que tenia en la casa decidió aceptar. Mi mujer se fue al cuarto y se vistió de colegiala con unos zapatos de tacón alto. Mientras tanto puse el canal de películas porno y encendí la laptop poniendo seleccionando de un pagina de chat un usuario cualquiera para que se conectara por webcam y viera el espectáculo de una noche especial.

Cuando mi esposa salio de la habitación parecía la mujer mas puta del mundo. El traje de colegiala era pequeño y las tetas querían explotar mientras la parte de abajo apenas le cubría el culo. Con los tacos altos apenas podía caminar y tenía la cara roja de vergüenza. Yo me acerque para abrazarla y decirle que todo estaba bien. Que solo tenía que seguir mis ordenes y que nada malo le pasaría. Tome su mano y se la lleve hasta el pantalón de José para que sintiera su verga dura.

Esa noche fue inolvidable: hicimos a mi esposa caminar por toda la casa vestida de colegiala, de secretaria y de mucama mientras José y yo la mirábamos con lujuria y le decíamos toda clase de cochinadas, y de vez en cuando yo miraba la laptop y veía con el afortunado desconocido de masturbaba con todas su fuerzas.

A la final le ordene a mi mujer que se pusiera de rodillas y le pedí a José que se sacara los pantalones y se acercara a mi mujer. Mi esposa entendió y le empezó a dar una chupada de campeonato. Mientras tanto yo miraba y cuando sentí que me faltaba poco para terminar me acerque por detrás a mi esposa que levantándola un poco se la metí sintiendo como ella se corría mientras José le llenaba la boca de leche. A la final yo terminé de llenarla toda de leche quedando los tres en el piso de la sala totalmente extasiados. Cuando me levante y miré la laptop ya el afortunado desconocido estaba desconectado (me imagino que después de masturbarse y vernos acabar cerro la cam).

Lo que ocurrió los días siguientes lo dejo para mi próximo relato.

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